viernes, febrero 16, 2007

Así estaban las cosas

Se iba abriendo paso poco a poco entre mis sentidos, desconocía todo lo que yo imaginaba
Su voz eran todas las voces que recuerdo
Era como el horizonte ; cada paso que yo daba, era un paso que se alejaba. Y fueron pasando los días tratando de negarla. Pero ella se multiplicaba
Salía al corazón de la pizarra y le hacía el boca a boca al verbo persistir
Se insinuaba en los libros que estudiaba y se despertaba cantando a la vuelta de cualquier página
Y lo mismo que un caudal de agua genera electricidad, a mí me producía suspiros y ansiedades. Me llevé todo el curso demandando libretas y lápices
El despertador en vez de sonar se reía de mí por las mañanas
La de veces que moría al ver que no me miraba, era como gritar dentro de una campana. Paseaba tembloroso por las cornisas, preguntaba por ella desconsolado por los tejados
No era culpa suya no saber de amor
Pero jamás renuncié ni a mi derecho a renunciar. Tal vez lo que me empujó fue esa capacidad que tengo para encajar los golpes, o quizás que era el último mes antes de morir Por eso fui apartando a la gente nada mas ver el despunte de su rostro en aquella velada
Me acerqué, la sujeté a mi cintura, y sin proponerle nada comenzamos a bailar
Entonces el mundo ya no se movía y mi corazón era la música de la orquesta
No sé que viento extraño nos dispersó, y nos fuimos andando por un camino que concluía en una playa. En aquel paseo las margaritas eran azules y el mar se veía encendido a lo lejos. Nos dimos la mano todo el rato, al llegar a la ribera nos paramos, entonces me pintó una estrella en el cielo de la boca
Su risa sonaba a poniente y caracolas. Las conversaciones, los mordiscos, las caricias, no tardaron en llegar. Todo lo que supe del amor fue producto de aquel baile
Yo me iba pisando una baldosa si y otra no , la sal del mar por fin me daba la razón
Los semáforos me transmitían secretos mensajes, y su voz iba delante mía como una antorcha
Así estaban las cosas aquel curso del 82, cuando andaba de noche con luz de día.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

En Paromités:
Cerezá con el amla parma al siré. Un ábrego, abestu. A rumba da noite, Jarim, jabo un abedul. Maitasunek.
Hus, cerezá, deladeu, cerezá, docement.
Castellano:
Desde la luna, aunque muerda el frío, la puerta de par en par, para cobijar a gente que no puede ver su cielo por la ventana, que no puede ver su mar por el camino.
PD. El texto de arriba es muchos y ninguno, no tiene traducción total, el de abajo se entiende o no se entiende. Reverencia.

Miguel dijo...

Gracias por esto,he entendido el de abajo.
Nos leemos con entusiasmo.
Un abrazo