jueves, septiembre 28, 2006

Eclipse

3 comentarios


Mirar mis manos y empezar a echarte de menos...
Abres tu bolso de colores , sacas el billete
y suena un bajo de guitarra
Atraviesas tres salidas , facturas dos maletas
y tres escaleras mas abajo me espera impaciente un adjetivo
Una lágrima que brota intuyendo una partida
Coleccionamos suspiros como sellos oxidados
Nos besamos a contra-Luna
y nos trasvasamos las bocas con abrazos en los andenes
Una voz de adiós inventada
en una ciudad en la que nunca vivimos
Alargan mi sombra triste las luces de la estación
Que solito me has dejado
Mis conversaciones sin tu risa
Mis células sin tus plaquetas
Un caballo , una cantimplora , una llanura
Un tatuaje que esconde tres cicatrices
que me hicieron tus verdades
Restos de puntas de lápices
que pueblan mi habitación al intentar dibujarte
En un abrir y cerrar de rosas el reloj tropieza conmigo
hablando con las manillas
-que bien te queda esa blusa-
La sangre de tu silencio, tu silencio en el espejo
los demonios en los reflejos
Desde que te fuiste siempre estoy anocheciendo
Te espero aquí con mis dos brazos en alto
Con 7 puertas abiertas
En este eclipse total.

*Un cronopio y una fama suben al tren...-Córtazar-
*Que se llama soledad -Sabina-


domingo, septiembre 24, 2006

Demasiado

2 comentarios


Ya no eran capaces de amar con los ojos cerrados.
Se les desprendieron las vocales de sus labios y no sabían recordar el olor a tierra mojada.
Sus miradas eran tan solo un color triste
Se consolaban en los mandamientos del 3x2 de los centros comerciales, en los engaños de los suplementos dominicales , en las emociones del mando a distancia
Se perdieron en la rutina; latas de cervezas, instrucciones del frigorífico, fosas comunes, agujeros negros, ladrillos, civilizaciones, normas de uso en las etiquetas de los champús
Se confundían con la masa.
Algo les impedía saltar hacia adelante: una sal demasiado dulce, un verde demasiado en amarillos ,vinos de noche que amenazaban madrugadas
Demasiado marco para tan pobre lienzo
Un día llorando se reconocieron y decidieron lanzarse al otro lado
Cayeron en dos columpios.
Mientras se balanceaban no paraban de reír
Los parques les echaban de menos.

-Escuchando Sabina "al otro lado de la NUBE NEGRA"-

jueves, septiembre 21, 2006

Lo mejor...

3 comentarios
Escribíamos apuntes al dictado de nuestros párpados
Teníamos un interrogante en la palma de la mano
Aquel 5 de Diciembre compartíamos la misma mesa de la cafetería del instituto
Y allí sentados descubrimos el ritmo de nuestras respiraciones
En mi bloc hacía dibujos , mientras repasaba yo surcaba los mares de tus ojos
Me miraste por primera vez
-Eres el chico que se sienta en la última fila de la clase
Anotamos diferencias
Y tú la chica que se sienta en la primera
Ella me mira de reojo
-¿Que dibujas?
Respiro, levanto mi bloc y le enseño medio círculo pintado en tinta azul
Ella asiente con la cabeza y me pregunta si le dejo el boli
Abre su libro y hace garabatos en la solapa, le pregunto que escribe
-Estoy sumando futuros que no son míos, presentes alquilados y multiplicandos pasados que aún no he pagado
¿Te salen las cuentas?
-Eso espero, si no nada tendría sentido
Bebe un poco de zumo, se recuesta, cierra las tapas del libro y lo deja reposar en sus piernas, me mira, hace una mueca
-¿Y tu que piensas?
No espero demasiado de mí, vivo de pequeñas cosas
Se aparta el flequillo, cierra los ojos un momento y hablamos: su capacidad de transmitir emoción esta mas allá de sus pupilas, como la facilidad de dejar caer un telón de terciopelo sobre la realidad al final de cada conversación
Y así pasan los minutos
Mira su reloj
–Tengo que irme, ya me iras contando todo poco a poco
Ehhh??
Se levanta, camina transportando su figura por ventanas que me invento, y la veo alejándose por los pasillos
Me dejo caer en la silla , es una tarde de otoño que ha nacido con 9 º de temperatura
Hago un giro, miro su silla vacía
¡Ha olvidado su libro¡
Salgo corriendo y la veo subida en el autobús , le hago señas y le enseño su libro
A través de la ventanilla me sonríe y hace gestos "mañana"… Y me muestra mi boli en su mano
Cruzo la calle , me paro, abro su libro (palpitaciones) y veo que debajo de los garabatos ha trazado un círculo cerrado en azul, y en el centro ha dejado escrito: “Lo mejor de conocerte es haberte comprendido”.


-Dedicado a todos los que se conocen en algún lugar-

domingo, septiembre 17, 2006

Lluvia de verano

2 comentarios
Atraparnos las manos y cruzar corriendo la avenida mientras que los semáforos nos deletrean en Morse y los claxon nos murmuran canciones
Rechazar los anuncios de psiquatras que te aconsejan no volar más alto que los pájaros
Sentir el mismo viento mágico que echó a girar los caballitos del viejo carrusel
Cada uno de nuestros pasos es un escudo con lo que la cansada avenida se proteje del asalto de la lluvia
Lluvia de alambres de plata que tejen en el suelo un manto azul, y tu sombra cosida en cada charco
El sol apartado silva su olvido
Reírnos e imaginar que los paraguas son signos de interrogación que rematan las cabezas de la gente
Lanzarnos aviones de papel sobre nuestras caras con mensajes de edredones
Dos sillas con vistas a tu pelo , dos tiket de café, dos empanadas de atún : 4,5 euros
Jugar, correr, besar, saltar, reir hasta hiperventilar
Adelantarte cinco peldaños de escaleras, seguir tus huellas , andar tus pasos , y yo un pirata tuerto persiguiendo tus puñales
Parar en seco, besar tus labios
Sugerir camisa por falda , mi mente aconsejándome locuras, y una madre por cada latido que me van sobrando de dos en dos
Plantar un árbol, pedirnos deseos que empiezan por "a"
El ruido de las vocales cayendo en la alfombra como caen los teoremas desde el cielo de tu boca
Vibrarnos los cristales del pecho, como vibra el reflejo de la Luna en los charcos de la calle
Integrarnos como tierra en lluvia de verano
Intuir que no hay medida.

miércoles, septiembre 13, 2006

Jugando

4 comentarios
Juego a salir del sótano y encender todas las luces de neón y carteles luminosos al recordarte
Juego a escribir tu nombre en los billetes de autobuses que pierdo
A cantarte nanas sin nombres , a poblar tus blusas de cuadros en mi perchero , a rescatar mi viejo tren de hojalata, a ver tus pupilas dilatadas a las ocho y cinco
Juego a desempolvar la guía de teléfono de 1992 tan solo para ver el nombre de tu calle, a buscarte en cada café que tomo, a sacarle la lengua a la señal de prohibido girar a la izquierda, a reciclar los palillos de las máquinas de café para hacer una escalera y mirar tu rostro mas allá de las nubes
Juego a poner tu sonrisa de plastilina en el peso de tu nombre en mi memoria
A partir la publicidad de los anuncios: “ si no queda satisfecho le devolvemos su tristeza.”
A recordar tu nariz tiritando en mis 4 puntos cardinales, a que adivines las vocales que llevo en mi puño, a que te quedes sin aire para suspirar , a buscarte en los eslabones oxidados de los columpios
Juego con la ilusión de visitar otra vez tu orilla, a desencriptar tus claves de accesos , tu mapa del tesoro, a conocer el último verso que duerme en el pliegue de tu bufanda
Juego para creer en el infinito, en la vida después de la muerte, en las salidas de emergencias que me lleven hacia ti
Juego para creer en el sur de los veranos

lunes, septiembre 11, 2006

Un parque.

2 comentarios
Tratar de explicarlo es intentar escuchar una acuarela.
Algo así a tierra y viento.

Algo parecido al futuro en lo que andamos.
Entonces era invierno en primavera , o tal vez al revés...
Solíamos dejarnos caer por allí, como si fuese una casualidad encontrarnos siempre en el mismo banco. Nos engañábamos con algo de ingenuidad compartida.
En nuestro horario de clases habíamos introducido una nueva asignatura a primera hora “vernos”.
Por eso temblaba cada vez que me acercaba y no te localizaba , y cuando emergías entre los árboles y con tu voz de agua murmurabas “buenos dias...”,empezábamos a medir el tiempo en latidos y nuestros ojos se mezclaban como acuarelas en un vaso : y simplemente nos habíamos mirado...
Y en aquel parque nos sabíamos pan, compartíamos libros con hombros y la certeza de no ir solos cuando soñábamos.
Paseábamos , despertábamos las ventanas dormidas de febrero,los columpios y las terrazas, los bancos y los naranjos ,la fuente y el rosal, tus manos y las mías. .

sábado, septiembre 09, 2006

la chica de la 5ª planta

3 comentarios

La chica de la cafetería de la 5ª planta bautiza mi camisa con zumo de naranja recién exprimido.
Me pide disculpas ,sonrie, y yo tiendo mis pronósticos de lluvia para hoy.
Mientras me limpia con un paño húmedo le dedico dos respiraciones con mensajes de limón sobre su pelo.
A ocho pasos de distancia se gira, me mira, y siento que me lanza un globo rojo sobre mi cara.
¿A cuantas cerillas encendidas equivalen la luz de su sonrisa?.
¿Se me ha movido el corazón al otro lado del pecho?.
Dos años en el mismo edificio y hoy sus labios empiezan a saberme a gajos de naranja.
Manos que antes sólo se cruzaban y ahora calculan la probabilidad de un abrazo.
Pero hay días que tiras dos dados sobre la mesa y suman 12.
Y coincidir en el mismo ascensor era como sacar la bola blanca del saco de las bolas negras, sin embargo las hipótesis viajaban hoy en elevador.
Pómulos que ríen a 50 metros del suelo, la chica que se presenta,que se acerca , latidos de redobles de tambores...
Y de repente -sucedió algo- ,aquello me supo a hogar, a compañía, porque en su mano yo tocaba mis canciones.

Escuchando a Maga -diecinueve-Nos repartíamos los labios , los dientes y el hipo, y del alfabeto las impares, y en tus dedos...

lunes, septiembre 04, 2006

Así llovía

3 comentarios

Dos jóvenes, una calle, y un paraguas cerrado deliberadamente
Tu sonrisa mojada con olor a chicle de fresa
Porque nos gustaban las gotas de agua por nuestro cuerpo , las transparencias, el goteo en el pliegue de tu blusa
Las gotas paraban el tiempo
Nos mirábamos en un parabrisas intermitente a través de las cataratas que caían por nuestra cara
Tropezábamos
Resbalábamos
Nos caíamos
Nos moríamos de la risa
El día también moría
Una farola encendida a lo lejos
Por la calle-felicidad para un autobús
Nuestro aliento en los cristales formando corazones
R
acimos de gotas de agua deslizándose por tu pelo, océanos en los zapatos , y los billetes desteñidos entre nuestros dedos
Las llaves de tu puerta reflejan el brillo de la noche
Las ropas pegadas, empapadas de amor
Y mis labios que juegan al ajedrez con los cuadros de tu blusa
Dos jóvenes, un portal, y un paraguas abierto deliberadamente
En el otoño que preferíamos la lluvia a los paraguas.

* Recordando el capítulo 1 de rayuela,

sábado, septiembre 02, 2006

Cosas que suceden una sóla vez

2 comentarios
-Si encuentras a alguien especial
no dejes que se te derrame en los dedos
acuenca lo suficiente las manos
no la dejes escapar
.-


Hay cosas que suceden una sola vez al año y ocurren en una noche de verano:
Peces de colores en la superficie del mar nadan en espiral para ser acariciados por la Luna Nueva de Septiembre.
Las escenas exepcionales son para los que llevan estrellas fugaces en sus zapatos, para los que le dan cuerda al calendario y arrancan las horas del reloj,para los que quieren dias de lluvia y no paraguas.
No hay mejor silencio en estos últimos dias de verano como el de 2 respiraciones desnudas a merced del mar,cuando las olas se tiñen de noche y las noches se visten de ti.
Y mirar a través del cielo y partir nuestras piezas y encajarlas y cosernos los bordes con hilo del mismo costurero...Y aprender a respirar de nuevo, a disolverte en el paisaje.
Ojos, Osa Mayor, Andrómeda, Vía Láctea, focos que no captan, que no pueden, bocas abiertas, y lo mejor de todo, lo único.
La marea que me devuelve desnuda a la orilla a la chica que sujeta en su mano la aguja y el hilo.

viernes, septiembre 01, 2006

y apareces

0 comentarios
Y apareces corriendo por la calle. Y a tu paso se encienden los anuncios luminosos de los bares. Los semáforos se quedan sin matices porque dentro de ti habitan los colores.
Y tomas posesión de las aceras. El gris inoportuno del asfalto se hace rehén de tus tacones.
Y te gritan los obreros de las casas, y se abren las persianas, y las estrellas se posan en los balcones.
Y yo levanto un rascacielos a la altura exacta de tus ojos.
Y como dos trenes que se miran cara a cara. Mueves los labios y me dices que me amas.